Si a lo largo de nuestra existencia hemos sido capaces de cambiar otra vida para bien, la nuestra ya habrá conseguido alcanzar un sentido y dejado una impronta en la eternidad…
La asociación "Joëlle Ayuda" se crea ante la necesidad de prestar ayuda a niños y niñas desfavorecidos por los avatares de sus vidas
Joëlle Brupbacher era una alpinista suiza fuerte, discreta y entregada a los demás que perdió la vida por agotamiento extremo en el monte Makalu de Nepal, después de hacer cumbre en el año 2013. Joëlle había escalado con anterioridad el Daulaghiri en Nepal, el Cho Oyu en el Tíbet así como el Broad Peak y el Gasembrum I en Pakistan, todas ellas cumbres conseguidas sin ayuda de oxígeno artificial.
La montaña era su pasión y en sus viajes siempre ayudaba a las poblaciones visitadas ofreciéndoles ropa, material, comida y ayuda médica, colaborando con la realización de campos médicos en el pueblo de Seduwa en el valle del Makalu y de Hushé en el valle del Baltoro. Su muerte supuso un duro golpe para todos aquellos que la conocíamos y, más aún, para los que compartíamos sus pasiones, alegrías y amor por la montaña.
Tras su desaparición nos ha dejado un vacío inmenso imposible de llenar.
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Quizás vivir sea esto es un libro de pasiones y sueños, de valiosas lecciones, donde Jorge desnuda su alma en un relato íntimo que permite sentir el frío, el cansancio, las alegrías, el dolor y la soledad. Y también es el desgarrador relato de la muerte de su mujer, Joëlle, y su mejor amigo, el famoso alpinista Iñaki Ochoa de Olza, cuando perseguían el sueño compartido de escalar los catorce ochomiles. Así que, cuando Jorge hace cumbre en la última de las catorce cimas, le embarga la emoción de ofrecérselo a las personas que realmente lo amaban y ya no están a su lado.
